Por Edwin Chiriví Bonilla

Gerente de Camacol Bogotá y Cundinamarca

Cerramos un 2023 en un contexto económico desafiante para el sector constructor, que es y seguirá siendo un pilar de desarrollo regional y nacional. El próximo año nos plantea un gran reto como gremio, pues nuestra actividad será un eje central de la estrategia contracíclica para la reactivación económica, la generación de empleo y la atracción de inversión.

Esta es una tarea que debemos seguir construyendo juntos y de la mano de los nuevos mandatarios regionales. Por eso vemos con optimismo su llegada, ya que en los acercamientos y reuniones que hemos tenido con los mandatarios y con sus equipos, nos han transmitido la firme convicción de trabajar conjuntamente por Bogotá y Cundinamarca, y cumplir con nuestra premisa de brindar acceso a la vivienda de miles de familias colombianas y aportar al desarrollo urbano sostenible y de calidad.

Para el cierre de 2023, prevemos que en Bogotá y Cundinamarca se habrá comercializado más de 53 mil unidades de vivienda, de las cuales 37 mil serían de interés social. Esto representa una reducción del 35,8% en comparación con lo comercializado en 2022, una estimación que empezamos a proyectar desde marzo y que se materializó con el aumento de las tasas interés, la disponibilidad de subsidios y otros factores que llevaron a la baja comercialización de vivienda.

Nuestra invitación es a visualizar el 2024 con optimismo y realismo. Esperamos que, con la reducción prevista de dos puntos porcentuales en la tasa de interés hipotecaria, esta tendencia continúe y experimentemos un aumento en las ventas entre el 10% y el 15% durante el próximo año.

Particularmente en Bogotá, la administración saliente dejó 23 planes parciales adoptados que aportarán suelo para más de 115 mil viviendas. Un hecho que permite tener un buen punto de partida, subrayando la relevancia fundamental de la habilitación de suelo para el sector. A su vez, es necesario trabajar con el nuevo alcalde de Bogotá por la implementación de una política de vivienda con un mayor alcance, algo que desde el gremio ya hemos puesto sobre la mesa y en lo que estaremos insistiendo desde nuestra gestión gremial.

Los desafíos clave que hemos planteado desde Camacol B&C a la administración entrante incluyen establecer una visión a largo, condiciones para la inversión de largo plazo a través del Plan de Ordenamiento Territorial y su reglamentación; crear programas de subsidios para facilitar el acceso a la vivienda; impulsar la reactivación del sector con incentivos para habilitar suelo y promover renovación urbana; darle impulso a la integración regional, además de trabajar en la simplificación y eficiencia de los trámites para mejorar la competitividad de nuestra actividad..

A nivel de Cundinamarca, presentamos al nuevo gobernador nuestra propuesta para respaldar a los municipios en la actualización de sus instrumentos de ordenamiento territorial, condiciones propicias para el desarrollo de proyectos de vivienda. También abordamos la importancia de garantizar la oferta de servicios públicos y saneamiento básico, considerando este último aspecto un desafío prioritario.

Porque #JuntosConstruimosMás, los invito a que trabajemos de la mano del sector público, con sólidos argumentos y visión constructiva. Desde mi rol, seguiré insistiendo en que el sector de la construcción y toda su cadena productiva son actores indispensables en la generación de empleo, la sostenibilidad, la formalización, el crecimiento económico y, por supuesto, el acceso a vivienda digna de los ciudadanos.

¡Feliz Navidad y próspero 2024 les desea el equipo de Camacol Bogotá y Cundinamarca!